25 septiembre 2009

STEVIE WONDER: IMPROVISADOR DE PURA SANGRE, EN SOUL TRAIN

Alrededor de 1441 africanos en condición de esclavos fueron secuestrados para arribar al Nuevo Mundo. Desde ese entonces, entre un sinfín de imposiciones, se intentó que todos aquellos que provenieran de África perdieran de forma sistemática cada pieza que componía su propia identidad. Así factores como los estándares de belleza fueron totalmente represivos. El privilegiar a la piel blanca, el cabello liso y delgado, o la nariz y la boca fina en términos anatómicos, descartaba de forma completa a quienes sufrirían (y sufren) siglos de racismo y violencia injustificada.

A partir de una defensa más que pacífica como es la música, programas dedicados a la difusión de la música negra como el mítico programa estadounidense Soul Train se encargaron de reafirmar la identidad negra desde la base misma de su país: los jóvenes afroamericanos. Tanto los participantes del show como el target al que el programa apuntó durante sus 35 años en el aire, fueron jóvenes que precisaban decir "aquí estámos y, a pesar de lo que nos ha pasado y pasa, somos lo más alegre que puedas encontrar".

Y justamente fue un músico de fuerte compromiso social como Stevie Wonder quien visitara el programa en 1973. Ciego desde nacimiento, aprovechó el increíble potencial de sus oídos para convertirse en uno de los compositores más reconocidos de la historia, al punto de ser calificados por algunos como el músico del siglo. Creador de nuevas tonalidades musicales y una técnica vocal sin límites, Wonder ha sabido no encerrarse en ningún género y explorar territorios donde el rozar de estilos musicales como el soul, funk, rock, blues, jazz y pop lo han ayudado a crear canciones con un estilo único y tan personal que el sonar de un par de notas o acordes ya lo delatan.

En aquel 1973, Don Cornelius, presentador, productor y creador del programa Soul Train, lo invitó para dar un concierto. En un pasaje de aquella edición, Don Cornelius le pidió a Wonder que ideara una canción propia para el programa, del cual al parecer el músico tenía algo pensado. Así, rodeados de bellas cabelleras afros y de una energía exageradamente positiva, Wonder juega con su piano y cuerdas vocales, generando con los presentes una química que los vuelve, sin tiempo para llegar a darse cuenta, parte de la canción.

4 comentarios:

  1. Muy bueno Nico lo que estás haciendo desde tu escritura y los temas elegidos, hasta tu mirada traducida de manera muy poética. Felicitaciones!!Y seguí deleitando con el blog.

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  2. Me alegra mucho que gustes de la escritura !

    Más porque eres una gran poeta ! (tengo colgado en la habitación tu recuerdo de Brasil)

    Saludos

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